miércoles, 11 de mayo de 2016

miércoles, 4 de mayo de 2016

Mientras todo era mentira

Nunca me sentí libre. Pero mientras tanto era alegre. Nunca eché de menos el mar, hasta que mis lágrimas me recordaron a él. Yo reía y ahogaba las penas en la pena. Nunca estuve lo suficientemente solo, ni lo poco acompañado que quise. Todo era excesivo en mí, aunque yo seguía riendo. Nunca les dije las cosas a la cara y sin embargo, no perdonaba al espejo. Y seguí viviendo allí donde las cosas duelen más o duelen menos, porque no son las cosas reales. Y me creí rodeado de reyes y reinas a las que cual bufón elegido, tenía que mantener siempre alegres y protegidos. Un bufón con ínfulas de curandero superdotado. Y vivía feliz, porque nunca me permití que me vieran triste.